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Selva Nevada

Abasteciendo frutas autóctonas de pequeños agricultores en regiones del posconflicto en Colombia

  • Company
  • Agricultura
  • Latinoamerica
  • 2018
  • Activa

El Desafío

Colombia es uno de los países con mayor biodiversidad en la tierra y, como resultado, alberga una gran variedad de frutas exóticas que incluyen açaí, camu camu, arazá y copoazú. Estas frutas se cultivan principalmente en la cuenca del Amazonas y en la selva tropical de Chocó y la Serranía del Darién en la costa pacífica. Sin embargo, en las últimas décadas estas regiones se han visto profundamente afectadas por el conflicto armado en Colombia.

La presencia de grupos al margen de la ley involucrados en el tráfico de drogas, ha obligado a muchos agricultores rurales a abandonar la producción de fruta y participar en la producción ilegal de coca, o también tomar el camino de la migración a diferentes zonas urbanas del país. Como resultado, un promedio del 55% de la población en estas áreas vive en la pobreza y el 21% vive en la pobreza extrema. El gobierno colombiano ha luchado durante mucho tiempo para encontrar soluciones para abordar los problemas de la pobreza rural y la migración, pero las oportunidades para aumentar los ingresos y conectar a los pequeños agricultores con los mercados son limitadas.

La Innovación

Selva Nevada aborda los problemas de la pobreza rural a través de su variedad de productos a base de frutas exóticas congeladas, que incluyen helados, batidos, bowls y mezclas de pulpa de frutas.

Durante la última década, la demanda internacional de productos exóticos y los superalimentos ha venido en aumento debido al interés de los consumidores en adquirir alimentos que cuenten con una alta concentración de antioxidantes y vitaminas. Zonas como la cuenca amazónica, Chocó y la Serranía del Darién son ricos en este tipo de frutos, de donde Selva Nevada adquiere sus productos.

Selva Nevada paga a las asociaciones en el momento de la cosecha, a veces ofreciendo capital de trabajo a los agricultores durante la temporada de crecimiento, comprando frutas en volúmenes predeterminados a largo plazo para crear ingresos estables para los pequeños agricultores. La empresa provee soluciones brindando una salida a frutas que anteriormente se echaban a perder, y garantizando una nueva fuente ingreso adicional a las familias campesinas. Actualmente las frutas son cosechadas de manera sostenible, ya sean recolectadas directamente de la selva tropical, o cultivadas naturalmente en granjas locales que protegen la biodiversidad natural y conserva los bosques de Colombia.

Impacto

Selva Nevada obtiene las frutas de asociaciones de comunidades rurales que son propiedad y son operadas por los mismos agricultores, y en algunas ocasiones de comunidades indígenas de la zona.

De igual forma, al crear una nueva cadena de valor agrícola de alto valor, Selva Nevada puede generar prosperidad en las regiones a través de un enfoque multifacético que incluye la asistencia técnica de transferencia, asegurar volúmenes y proporcionar un precio premium que impacta positivamente a los hogares rurales.

Selva Nevada fabrica sus productos en una instalación centralizada en Bogotá, donde luego los distribuye a diferentes tipos de clientes, desde hoteles y restaurantes, hasta tiendas especializadas y puntos de venta propios, lo que vincula a las comunidades rurales con mercados de alimentos Premium.